Los
sectores de living, retail y sanidad también sufrieron caídas
significativas, con descensos del 39%, 38% y 37% respectivamente. Incluso
el sector industrial, que había mostrado cierta resiliencia en periodos
anteriores, no fue inmune a la tendencia a la baja.
Desempeño
por Países
La contracción
de las inversiones no se limitó a un único mercado, sino
que se extendió a los siete principales mercados europeos. Francia
registró la mayor caída, con una contracción del 54%
y un volumen de inversiones de 2.500 millones de euros. En España,
las inversiones descendieron un 35%, hasta los 2.100 millones de euros.
A pesar de ser el país con el mayor volumen de inversión,
el Reino Unido también experimentó una disminución
del 19%, situándose en 11.500 millones de euros.
Perspectivas
y Recuperación
A pesar del
panorama desalentador, los expertos del sector son optimistas respecto
a una recuperación gradual. CBRE destaca que la confianza de los
inversores podría retomarse en lo que resta del año, impulsada
por una estabilización económica. En abril, se observaron
signos positivos en sectores como las residencias para estudiantes y las
viviendas multifamiliares desde febrero, lo que sugiere un posible repunte
en la demanda de ciertas categorías inmobiliarias.
“Esperamos
que el sector se vaya recuperando de manera gradual, aunque los inversores
se enfrentan a presiones por los casi dos años de inactividad del
inmobiliario”, señalan desde CBRE. Este optimismo está basado
en la premisa de que la estabilización económica y el ajuste
de expectativas contribuirán a restablecer la confianza en el mercado
inmobiliario europeo.
Ejemplos Prácticos
Caso 1: Oficina
en París
Una oficina
en el distrito financiero de La Défense en París, valorada
en 50 millones de euros, experimentó una falta de interés
significativo, con solo dos ofertas recibidas en el primer trimestre. Esto
ilustra la caída del 51% en inversiones en oficinas, donde el alto
coste y la incertidumbre económica han disuadido a los inversores.
Caso 2: Hotel
en Barcelona
En contraste,
un hotel boutique en el centro de Barcelona fue adquirido por 30 millones
de euros, reflejando el aumento del 1% en el sector hotelero. La demanda
turística y la reactivación del turismo post-pandemia han
sido factores clave en esta tendencia positiva.
Conclusión
El primer trimestre
de 2024 ha demostrado ser desafiante para el sector inmobiliario comercial
en Europa, con una caída generalizada en las inversiones. Sin embargo,
sectores específicos como los hoteles muestran resiliencia, y se
prevé una recuperación gradual conforme la economía
se estabiliza y la confianza de los inversores se restaura. La vigilancia
constante de las tendencias y el análisis detallado de los datos
serán esenciales para navegar estos tiempos inciertos y aprovechar
las oportunidades emergentes en el mercado inmobiliario europeo.
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