En este sentido,
la Socimi Adriano Care, gestionada por Azora, es un buen ejemplo de la
conveniencia de este tipo de inversiones. Con la reciente adquisición
de la residencia Domus Claret en Barcelona por 18 millones de euros, la
compañía se acerca a completar su objetivo de inversión
de 250 millones de euros en residencias para la tercera edad. Con esta
operación, la socimi suma una cartera de 23 activos y se posiciona
como uno de los mayores propietarios institucionales del sector.
La residencia
Domus Claret cuenta con una capacidad de 262 plazas y una superficie de
aproximadamente 11.000 metros cuadrados sobre rasante. Está ubicada
en el céntrico barrio La Sagrada Familia de Barcelona y está
alquilada a DomusVi, uno de los principales operadores de residencias en
España, con un contrato de arrendamiento a largo plazo. Adriano
Care prevé invertir en la actualización del activo para adaptarlo
a las necesidades actuales de los mayores con criterios de sostenibilidad
y eficiencia energética.
En conclusión,
la inversión en residencias de tercera edad en España puede
ser una opción segura y rentable para los inversores que buscan
diversificar su cartera. Sin embargo, es importante contar con una gestión
profesionalizada que garantice un buen servicio y la rentabilidad de la
inversión. La Socimi Adriano Care es un buen ejemplo de cómo
hacerlo bien y de cómo esta opción de inversión puede
ser una apuesta segura.
¿QUÉ
DEBE TENER UNA GESTIÓN ESPECIALIZADA DE RESIDENCIAS DE TERCERA EDAD?
Una gestión
especializada de residencias de tercera edad debe tener en cuenta varios
aspectos importantes para garantizar la calidad de vida de los residentes
y el éxito económico del negocio. Algunos de los elementos
clave de una gestión profesionalizada de residencias de tercera
edad incluyen:
•
Atención centrada en el residente: La gestión de una residencia
de tercera edad debe estar enfocada en las necesidades individuales de
cada residente, asegurando que se les proporcione un entorno seguro, confortable
y adecuado a sus necesidades. La atención a la salud, la nutrición
y la socialización son algunos de los factores clave que se deben
tener en cuenta para garantizar la satisfacción del residente.
• Personal
capacitado: Es fundamental que el personal esté capacitado y formado
en las áreas de atención a los residentes, seguridad, salud
y prevención de riesgos laborales. Los trabajadores deben contar
con la formación adecuada y tener la experiencia necesaria para
tratar con las necesidades y demandas de los residentes.
• Infraestructura
adecuada: La infraestructura de la residencia debe estar diseñada
y equipada para brindar comodidad y seguridad a los residentes, incluyendo
sistemas de seguridad, áreas de rehabilitación, salas de
terapia, zonas comunes, entre otros aspectos.
• Gestión
financiera efectiva: Una gestión financiera efectiva es esencial
para garantizar la viabilidad a largo plazo de la residencia. La gestión
financiera debe incluir el control de costes, el seguimiento de ingresos
y egresos, el mantenimiento y actualización de la infraestructura,
entre otros aspectos.
• Comunicación
efectiva: La comunicación efectiva es vital en la gestión
de una residencia de tercera edad. La gestión debe establecer canales
de comunicación abiertos y efectivos con los residentes, sus familiares
y el personal de la residencia para resolver cualquier problema o necesidad
que surja.
En resumen, una
gestión especializada de residencias de tercera edad debe estar
enfocada en el residente, contar con personal capacitado, una infraestructura
adecuada, una gestión financiera efectiva y una comunicación
efectiva. Todos estos elementos trabajando en conjunto pueden garantizar
el bienestar y la satisfacción de los residentes, así como
el éxito económico del negocio.
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