Otras ineficiencias se encuentran en procesos de oficina, como la selección de proveedores y la emisión de órdenes de compra (PO). Según el estudio, se revisan en promedio 11 proveedores para casi 170 equipos por proyecto, lo que representa una inversión de tiempo considerable.  

Un obstáculo principal es la tecnología obsoleta, como el uso de papel y lápiz o hojas de cálculo básicas, herramientas que aún utilizan el 65% de las empresas constructoras.

Con el 44% del presupuesto de los proyectos de construcción gastado en cadenas de suministro, las empresas tienen una gran oportunidad de recuperar sumas significativas de dinero. Según el 31% de los encuestados, la falta de herramientas digitales e innovación es el mayor desafío que enfrentan. Las herramientas y plataformas digitales que podrían superar estos problemas ya existen y han sido empleadas en otras industrias durante años. Incluso pequeños cambios podrían marcar una gran diferencia.

La industria de la construcción está lista para una evolución rápida al adoptar tecnologías más avanzadas y eliminar las ineficiencias descritas. Las herramientas digitales ofrecen múltiples oportunidades para reducir costos, desde permitir una completa visibilidad de la cadena de suministro hasta reducir cargas administrativas. Un cambio de mentalidad hacia la tecnología será crucial y quienes lo adopten obtendrán ventajas competitivas significativas.

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