El
sector eólico enfrenta desafíos, como la demanda incierta
y procedimientos de permisos lentos y complejos, además de otros
obstáculos como la falta de acceso a materias primas, la alta inflación
y precios de las materias primas, y la creciente presión de competidores
internacionales.
Como parte
del plan, la UE se compromete a acelerar el ritmo de despliegue de proyectos
eólicos, enfocándose en la digitalización de procesos
de permisos y asistencia técnica a Estados miembros. Además,
se busca mejorar la visibilidad de proyectos mediante compromisos eólicos
y planificación a largo plazo.
Se propone
también un mejor diseño de subastas y un mayor acceso a financiamiento,
incluyendo la colaboración del Banco Europeo de Inversiones. El
plan tiene como objetivo crear un ambiente internacional más justo
y competitivo para los proyectos eólicos, monitoreando prácticas
comerciales desleales y utilizando acuerdos comerciales para facilitar
el acceso a mercados extranjeros.
En 2022, la
capacidad instalada eólica marina de la UE llegó a 16.3GW,
lo que indica que para cerrar la brecha entre la capacidad de 2022 y la
comprometida por los Estados miembros, se debe instalar un promedio de
casi 12GW al año.
Maroš Šef?ovi?,
vicepresidente ejecutivo para el pacto verde europeo, destacó la
importancia de una transición verde con una base industrial sólida.
Mientras que Kadri Simson, comisaria de energía de la UE, enfatizó
el compromiso de la UE de liderar la transición energética
y la relevancia del sector eólico para lograr las metas climáticas
y energéticas.
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