Según
datos de Enea, el sector de la edificación es responsable de alrededor
del 40% del consumo final de energía y del 36% de las emisiones
de CO 2. Para mejorar el rendimiento de los edificios, la Comisión
Europea ha lanzado objetivos muy desafiantes: duplicar la tasa de renovación
de los edificios, que actualmente ronda el 1% en Italia, y convertirlos
en cero emisiones netas de CO 2. Para permitir un cambio de ritmo en la
recalificación energética de los edificios, la Ola de Renovación
señala un camino muy concreto, el de las rehabilitaciones sostenibles,
basadas en los principios de la economía circular, maximizando también
el uso y valorización de materiales secundarios en todas las fases
de el ciclo de vida
La legislación
de edificación vigente también prevé que los edificios,
construidos desde cero o sujetos a reformas importantes, se realicen con
un consumo energético casi nulo. A esta categoría pertenecen
los edificios de clase A. Esto significa que el techo, las paredes y los
accesorios son altamente aislantes y no intercambian/dispersan calor con
el exterior, que puede haber sistemas de sombra y que los sistemas de aire
acondicionado de verano e invierno son altamente eficientes. , en parte
alimentado por fuentes renovables y controlado con sistemas domóticos.
El suministro eléctrico es completamente eléctrico y, por
supuesto, los edificios están todos equipados con paneles fotovoltaicos
y no están conectados a la red de gas.
La deducción
es igual al 50% del impuesto adeudado por la compra. La escritura con base
en las provisiones deberá realizarse necesariamente antes del 31
de diciembre de 2023. La deducción se divide en 10 cuotas anuales
iguales y se destinará a reducir el Irpf pagado en 2023 y en los
nueve años siguientes. Tal y como aclaró la Agencia Tributaria
la primera vez que estuvo en vigor la disposición, en ausencia de
una prohibición expresa, la deducción del 50 por ciento del
IVA en la adquisición de viviendas puede acumularse con las demás
concesiones relativas a intervenciones en edificios realizadas a cabo por
las empresas.
La bonificación
del IVA, por tanto, puede combinarse con las deducciones por la compra
de unidades inmobiliarias dentro de un edificio totalmente rehabilitado
por la constructora. La deducción en este caso es igual al 50% correspondiente
al 25% del precio de compra del inmueble (considerado como coste a tanto
alzado de los gastos de reforma) hasta un máximo de 96.000 euros.
Gracias al mecanismo aplicable, la doble deducción, sobre el IVA
y sobre los costes de reestructuración a tanto alzado, permite una
mayor desgravación. A menos que se indique lo contrario, la bonificación
también debe ser acumulable con la compra de sismabonus que, en
cambio, prevé un descuento de hasta el 85% del costo en caso de
trabajos de demolición y reconstrucción en áreas sísmicas,
combinado con medidas de ahorro de energía.
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