| Según
la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos
(OCDE), Hungría, Chipre, Finlandia e Irlanda tienen la mayor proporción
de viviendas desocupadas de Europa.
En Hungría,
se estima que el 12,3% de las propiedades están actualmente desocupadas;
solo en Budapest se cree que hay entre 50.000 y 70.000 pisos vacíos.
Hungría tiene una población que envejece y disminuye, y muchas
personas se mudan de pueblos rurales más pequeños a grandes
áreas urbanas. De los aproximadamente cuatro millones y medio de
viviendas del país, poco más de 550.000 están desocupadas.
Pero no se trata de una burbuja especulativa en Hungría: por lo
general, los propietarios de propiedades vacías simplemente no tienen
el dinero para renovarlas.
La situación
es similar en Polonia donde el 11 % de los pisos están desocupados,
según datos nacionales, una cifra notablemente superior a la estimación
de la OCDE.
En Francia
se estima que el 8% de las viviendas están desocupadas.
Para los legisladores
europeos, las casas vacías amenazan la asequibilidad de la vivienda,
especialmente en las grandes ciudades. Por este motivo está en debate
aumentar su fiscalidad.
El primero
ha sido Austria donde los estados de Salzburgo y Estiria aprobaron leyes
que otorgan a los municipios locales el derecho a gravar los pisos vacíos.
El impuesto debe tenerse en cuenta al redactar contratos de alquiler y
contratos de venta. El impuesto de desocupación se aplica a los
pisos que no se usan en absoluto, así como a los pisos que solo
se usan como residencia adicional (viviendas de vacaciones). La ley entró
en vigor en Estiria en octubre de este año y entrará en vigor
en Tirol y Salzburgo a partir de enero. El impuesto de desocupación
sólo se cobrará una vez que los municipios hayan aprobado
la legislación pertinente.
Irlanda, donde
se estima que el 9 % de las viviendas están desocupadas, ha adoptado
un enfoque diferente. El 14 de noviembre, el ministro de Hacienda anunció
el Impuesto de Desocupación (VHT). El principal objetivo de este
nuevo impuesto es aumentar la oferta de viviendas en alquiler o compra
para satisfacer la demanda. El impuesto gravará las propiedades
residenciales que se ocupan como vivienda por menos de 30 días en
un período de 12 meses.
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