A nivel provincial,
estimamos que Alicante, Valencia, Málaga, Sevilla y La Coruña,
con ratios de cobertura por debajo del promedio nacional, entre un 2,20
y un 3,11, presentan en 2021 la mayor necesidad de inversión en
camas, con alrededor de 43.000 camas en total.
Madrid y Barcelona,
con ratios de cobertura de un 4,2 y un 4,8, respectivamente, requieren
una inversión de más de 16.000 camas en términos aproximados.
Estos dos grupos
representan más de la mitad del mercado, donde existe mayor necesidad
de inversión en plazas.
Una nueva tendencia
de residencial para mayores está apareciendo, el Retirement living
(viviendas tuteladas). Este concepto está todavía en una
etapa muy incipiente en España, pero en mercados maduros como Estados-Unidos,
Canadá, Dinamarca o Finlandia ya es un concepto consolidado. En
España, aun siendo actualmente un mercado relativamente pequeño,
existen dos tipos de modelos de negocio claramente diferenciados.
Por un lado,
el modelo de resort en costa, donde la mayoría de los clientes son
extranjeros y, por otro, el modelo urbano donde el cliente es mayoritariamente
nacional y local.
El aspecto
clave de este tipo de vivienda es generar una comunidad ofreciendo zonas
comunes, servicios y actividades adicionales para los usuarios. Están
enfocadas a un público autosuficiente que no solamente busca un
hogar, sino que también quiere integración social y compartir
experiencias y hobbies. El público objetivo es muy exigente, por
lo que la calidad de estos centros es una máxima, se componen de
unidades residenciales muy atractivas completamente adaptadas con una,
dos o tres habitaciones.
En base al
nivel de dependencia y los servicios que requieren las personas mayores,
se identifican tres grandes tipologías de alojamiento actualmente
en el mercado español de tercera edad:
•
Viviendas convencionales: vivienda (piso o casa) ocupada por una persona
independente que puede vivir sola y que necesite o no determinados servicios
a domicilio.
• Retirement
living (vivienda tutelada): complejo de viviendas o comunidad residencial
diseñado específicamente para adultos mayores no dependientes.
Normalmente
estas comunidades ayudan a socializar y promueven las actividades de los
residentes, además de facilitar la ayuda de agencias de atención
domiciliaria si fuese necesario.
Actualmente
no hay una regulación específica para este tipo de vivienda/comunidad.
El perfil del
cliente es una persona completamente válida e independiente de entre
60 y 85 años.
• Residencias
de tercera edad: centro que ofrece asistencia integral y vivienda permanente
a personas mayores de 60 años que por sus condiciones sociales,
económicas, sanitarias o familiares, no pueden ser atendidas en
sus propios domicilios y necesitan de estos servicios (definición
IMSERSO). El perfil del cliente es una persona con un nivel alto de dependencia
y una edad media de 85 años.
POSICIÓN
DE MERCADO
DomusVi es
la mayor red de centros sociosanitarios de España con más
de 25.800 plazas disponibles en 203 centros residenciales y de atención
diurna, a lo que se suman servicios destinados a la atención en
el hogar (ayuda a domicilio y teleasistencia) y atención sanitaria
a domicilio a través de DomusVi Healthcare.
En España,
la compañía tiene en marcha la construcción de 17
nuevas residencias de mayores que sumarán más de 1.500 camas.
Estos futuros centros se encuentran ubicados en las provincias de Alicante,
Mallorca, Pontevedra (2), Gerona, Navarra, Murcia, Santander, Madrid, Tarragona,
Lérida, Barcelona, Málaga, Tenerife, Orense, Álava
y Gran Canaria.
INFORME JLL
Residencias
de mayores: un mercado en plena expansión”, elaborado por la consultora
inmobiliaria JLL, que señala cuáles son las principales consecuencias
tras la pandemia, tendencias y previsiones de futuro.
El informe
prevé que en 2035 haya 12,8 millones de personas mayores de 65 años,
lo que implica un crecimiento de este segmento de la población del
38% respecto a 2020 (9,3 millones de personas mayores de 64 años),
incrementándose además la esperanza de vida en tres años,
hasta los 87. Son datos que necesariamente auguran un incremento en la
demanda de estos servicios por parte de los usuarios.
Esta demanda
de plazas en residencias prevista asociada a este envejecimiento de la
población es desigual, al haber diferencias entre las distintas
comunidades autónomas: Andalucía, Cataluña, Madrid,
Valencia y Galicia son los territorios que concentran el mayor volumen
de personas de 65 años o más en la actualidad. Y, de cara
al futuro, (2020-2032) destaca Murcia (con un incremento previsto del 52%),
así como Andalucía, Madrid y Valencia, con aumentos que se
sitúan entre un 40% y un 50%.
En cambio,
en otras regiones como País Vasco o Cataluña, se prevé
un menor crecimiento, entre el 30 y 35%. Destacan, además, las islas,
con subidas previstas del 64% y 56% para Canarias y Baleares, respectivamente.
Previsión
de aumento de plazas en residencias de mayores en el mercado español
Actualmente,
según las estimaciones de JLL, el mercado español cuenta
con 382.000 plazas repartidas en 5.500 residencias, de las cuales el 60%
son privadas. Se estima que en 2021 se terminen unas 60 añadiendo
unas 7.800 nuevas plazas al stock actual. Los operadores e inversores en
este segmento están desarrollando nuevos proyectos para los próximos
años y se estima para 2024 un stock de residencias que supere las
5.600 unidades y alcance las 407.000 plazas.
En cuanto al
tamaño de las residencias, el stock actual está formado principalmente
por residencias pequeñas y medianas, representando los centros de
más de 100 plazas tan solo un 23% del total. Sin embargo, el interés
de los grandes operadores e inversores especializados es la construcción
de residencias de más de 100 plazas, tamaño a partir del
cual se consiguen economías de escala suficientes, así como
la contratación de servicios comunes a jornada completa para disponer
de una oferta más atractiva para los inquilinos.
Actualmente,
según estimaciones de JLL, la tasa de cobertura (el número
de plazas en el mercado dividido entre la población mayor a 64 años)
del mercado español se sitúa en 4,15, una de las más
bajas de Europa, que anima a los inversores a trabajar en nuevos proyectos
para atender a la demanda. Realizando un análisis preliminar en
2021 se calcula que el déficit de la oferta es de 113.000 plazas,
con previsiones de superar las 134.000 en 2025.
Las comunidades
autónomas que tienen mayor déficit de camas son Andalucía,
Comunidad Valenciana, Galicia y las Islas Canarias. El ratio de cobertura
de estas regiones se encuentra por debajo del promedio nacional, por lo
que necesitarían, aproximadamente, una inversión de 77.000
camas en total para atender la demanda.
MERCADO DE
INVERSIÓN EN RESIDENCIAS DE MAYORES
En 2020, el
sector sanitario en conjunto alcanzó un volumen de inversión
de alrededor de 417 millones de euros, de los cuales 280 millones se destinaron
a residencias de mayores. Respecto al año anterior, el volumen de
inversión en el sector sanitario bajó un 37%, debido en gran
medida al impacto de la crisis sanitaria, las restricciones para viajar
y la posibilidad de visitar los activos por parte de los inversores, con
algunas operaciones pospuestas al primer trimestre de este año.
Desde JLL se estima que el volumen de inversión alcance los 600
millones de euros en 2021.
Entre las operaciones
de los últimos meses de M&A destaca la compra de Colisee, uno
de los mayores operadores europeos, por parte del fondo de inversión
EQT, donde JLL participó como asesor inmobiliario.
La rentabilidad
prime en residencias de mayores en España se sitúa en un
4,75% en el segundo trimestre de 2021, con un descenso de 25 puntos básicos
en la comparativa anual, motivado por el apetito inversor, y mostrando
estabilidad respecto al trimestre anterior. Esta rentabilidad continúa
siendo elevada comparada con otros países europeos y sectores inmobiliarios.
“El impacto
económico y operativo de la pandemia en algunos operadores ha sido
elevado, por lo que no descartamos un incremento significativo de operaciones,
ya sea mediante la venta de inmuebles o de empresas tenedoras de los mismos”,
subraya Juan Manuel Pardo, director de Living de JLL.
“El segmento
tiene no solo un evidente atractivo a corto plazo, sino que la evolución
demográfica en los próximos años, la solvencia de
los principales operadores y la estabilidad en los retornos, hacen que
cada vez haya más inversores buscando incrementar su exposición
al mismo. La figura del asesoramiento especializado se constituye como
elemento esencial en el proceso de maximización del valor”, añade
el experto.
La necesidad
de plazas de una población como la española cada vez más
envejecida, estimada en más de 67.000 plazas (solo en las principales
áreas metropolitanas y ciudades de más de 80.000 habitantes)
y la escasez de activos prime en el mercado, han aumentado significativamente
la inversión en proyectos de desarrollo a partir de la adquisición
de suelos dotacionales. En este sentido el mercado está evolucionando
hacia la unión de promotores–constructores especializados e inversores
con operadores, que estructuran cada vez más operaciones a partir
de la compra de suelos y contratos entre promotor e inversor.
TIPOLOGÍA
DE ALOJAMIENTOS
Entre las distintas
alternativas para los mayores, JLL identifica una tendencia incipiente
en España, pero que ya está consolidada en países
como Canadá, Estados Unidos, Dinamarca o Finlandia. Se trata de
los llamados retirement living, complejo de viviendas o comunidad residencial
diseñado para adultos mayores no dependientes, que permiten la socialización
de sus inquilinos y en las que se promueven actividades específicas
para ellos con opción a atención domiciliaria si así
lo requieren.
Por otra parte,
muchos mayores se decantan por continuar en su vivienda convencional, lo
que hace imprescindible una adecuación de los inmuebles con una
distribución interior que reúna unos mínimos requisitos
de movilidad.
Otros se trasladan
a residencias para la tercera edad que incluyen servicios más específicos
para personas dependientes que incluyen atención geriátrica,
enfermería, podología, fisioterapia, terapia ocupacional,
etc.
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