Las constructoras han cambiado sus métodos
de edificación y el resultado es que los albañiles, pintores,
electricistas, fontaneros y otras profesiones de la construcción
se han digitalizado para adaptarse a la cuarta revolución industrial.
Uno de los sectores que está viviendo más
cambios gracias a la aparición de Internet es el sector de la construcción,
un sector a priori analógico en cuanto a sus formas y sus modos
de proceder.
El reto de la transformación digital en
las empresas del sector de la construcción es una oportunidad estratégica.
Hay muchos obreros poco cualificados y muy pocos
especialistas en las nuevas necesidades del sector. En gran parte se podría
decir que se está envejeciendo el nivel de profesionales de la construcción
cualificados y esto afecta a la adaptación a los nuevos medios tecnológicos.
La aparición de nuevas formas de trabajo
asociadas al avance tecnológico, el uso de nuevos materiales y la
optimización de los procesos productivos requieren una fuerza de
trabajo cada vez más formada y profesionalizada. Existe una fuerte
polaridad de los ocupados hacia los niveles formativos básicos y
superiores, con una deficiencia de niveles intermedios. Es urgente una
mejora de la oferta en la formación profesional reglada, con ciclos
formativos conectados con el mercado laboral.
Esta es la razón por la que la Unión
Europea ha puesto en marcha durante la última década iniciativas
como la conocida como Build up skills (Construir competencias), para mejorar
la formación en el sector a nivel europeo.
Con todo, este empuje no está siendo suficiente.
Según fuentes patronales, en España hay un problema estructural
de cualificaciones a nivel de la FP que, aunque se empieza a corregir,
en el caso de la industria de la construcción, es sustancialmente
más grave y, lejos de mejorar, apunta a empeorar, con mayor alevosía
en lo relativo a la cualificación del personal a pie de obra.
En esta coyuntura, una solución son los
certificados de profesionalidad (una forma de homologar las capacidades
acumuladas por trabajadores que ahora no tienen forma de demostrarlo y
de formar a otros nuevos), para ampliar por ejemplo las posibilidades de
formación que llevan aparejados.
El listado de oficios de la construcción
es más complejo de lo que se puede suponer a primera vista. Por
esa razón es especialmente útil una guía que sirva
de orientación a los jóvenes profesionales de las empresas
constructoras que ocupan funciones administrativas pero desconocen el día
a día de la obra. Es decir, una introducción a los que son
los oficios de la construcción y su problemática.
De estos temas se trata, desde una perspectiva
práctica y profesional, en la guía práctica de oficios
de la construcción. |