El Plan de
Acción de BPIE proporciona recomendaciones basadas en evidencia
para todos los actores en la cadena de valor del sector de la construcción,
incluyendo: instituciones de la UE, Estados miembros y autoridades locales,
actores del mercado como como bancos minoristas y comerciales, inversores
institucionales, diseñadores de edificios, arquitectos e ingenieros,
fabricantes de materiales y tecnologías de construcción,
empresas de construcción (multinacionales y pymes), desarrolladores
inmobiliarios, proveedores de electricidad y combustibles, y propietarios
de edificios y viviendas.
“A medida que
nos enfrentamos a la crisis del coronavirus, es hora de considerar respuestas
combinadas a nuestros mayores desafíos. Podemos abordar el cambio
climático y apoyar la recuperación económica al mismo
tiempo, p. tomando en serio el lanzamiento de una ola de renovación.
Este sería
un esfuerzo colectivo que crearía mejores condiciones de vida para
todos ”, dice Oliver Rapf, Director Ejecutivo de BPIE. “Si bien los responsables
políticos tienen la responsabilidad decisiva de liderar la transformación
del sector de la construcción, todos tienen un papel que desempeñar.
Las acciones en todos los sectores deben estar alineadas, trabajando hacia
una visión unida”.
Rapf continúa:
“Estamos anticipando una transformación completa. No en forma de
conmoción, sino como un proceso integrador bien preparado: prácticas
de construcción y renovación, como son los edificios.
Integradas
con redes de energía y calor, estrategias para hacer que los edificios
sean resistentes a los impactos del cambio climático, el uso de
tecnologías digitales, cómo se financian las renovaciones
y muchas otras prácticas deberán evolucionar en comparación
con los estándares actuales”.
La ola de renovación
es una oportunidad única para impulsar la innovación y crear
nuevas oportunidades en el sector de la construcción al tiempo que
hace que los edificios europeos sean aptos para la neutralidad climática
y crea mejores condiciones de vida para todos los europeos. Se necesita
una acción fuerte y coordinada, y cada actor debe contribuir a un
resultado exitoso.
La ola de renovación
estará compuesta por muchos componentes: renovaciones, intervenciones
que se dirigen a segmentos específicos del parque inmobiliario y
aquellas que se centran en áreas particulares, innovaciones sectoriales
y soluciones a medida. Todo esto deberá ir acompañado de
una legislación de apoyo que permita medidas y acceso adecuado a
la financiación.
• Estimular
las economías locales, al tiempo que apoya la cohesión social
y las condiciones de vida más saludables.
• Apoyar el
logro de objetivos climáticos y una transición justa.
• Crear nuevos
y mejores empleos a lo largo de la cadena de valor de la construcción,
y nuevas dinámicas económicas para apoyar los servicios y
las industrias a nivel regional y local.
• Mejorar
la calidad de nuestros edificios y el ambiente interior, reduciendo los
problemas de salud relacionados con los estándares de construcción
deficientes.
• Cree oportunidades
de inversión en activos inmobiliarios a largo plazo que brinden
mejores y más saludables condiciones de vida y trabajo para las
personas.
• Centrarse
en ahorrar energía es importante, pero no suficiente. De hecho,
necesitamos dar a nuestros edificios una arquitectura mucho más
humana, cumpliendo con nuestra necesidad de condiciones de vida sostenibles
y socialmente orientadas.
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