Las principales
causas de disputa en la construcción son las derivadas de vicios
constructivos, los problemas de diseño, los cambios en las condiciones
del contrato, ya sea por temas derivados de cambios en las condiciones
pactadas o nuevas condiciones no contempladas en el contrato, cambios en
el plan de trabajo y problemas de pagos.
Las disputas
referidas a contratos de construcción generalmente surgen en contextos
que en la gran mayoría de los casos difieren los unos de los otros.
Es por ello que el grado de especialización que surge de este tipo
de disputas puede ser mucho mayor al que surge con motivo de otro tipo
de disputas en donde nos encontramos con controversias menos técnicas.
Una solución
a esa exigencia de especialización es el arbitraje de la construcción.
Los arbitrajes
relativos a los contratos de construcción presentan una serie de
características que los convierten en únicos.
En el arbitraje
en materia de construcción, la importancia de la carga de la prueba
es esencial.
Como simple
ejemplo, un contratista exigiendo daños y perjuicios por una demora
indemnizable en el plan proyectado, probablemente deba asumir la carga
de demostrar que: 1) la demora ocurrió; 2) la demora fue causada
por eventos fuera del control de la contraparte; 3) el contratista no fue
responsable por ninguna demora concurrente; 4) la demora causó daños
al contratista; y 5) el valor de esos daños.
En los procedimientos
arbitrales relativos a los contratos de construcción se han establecido
medidas y procedimientos tendientes a mejorar los parámetros de
calidad del procedimiento, con el objeto de aumentar la efectividad de
los mismos.
La práctica
arbitral de la Cámara de Comercio Internacional en el sector de
la construcción cuenta con un número considerable de laudos
arbitrales que ya han sido publicados y sistematizados por las revistas
especializadas.
Las cláusulas
sobre resolución de conflictos y arbitramento en los contratos internacionales
de construcción son de gran relevancia si se tiene en cuenta la
naturaleza de la actividad, la cantidad de prestaciones que se presentan
en este tipo de contratos, los largos periodos de tiempo en que se realizan
las obras y la naturaleza internacional de las partes contratantes.
Los asuntos
tratados en los litigios relacionados con los Contratos Internacionales
de Construcción se encuentran relacionados generalmente con problemas
técnicos, las técnicas y tecnologías involucradas
en los contratos de construcción son difíciles de entender
y sujetas siempre a cambios.
Mención
especial merece el Libro Rojo de FIDIC en la resolución de disputas
de contratos internacionales de la construcción.
El Libro Rojo
establece tal vez, uno de los procedimientos o medidas más adecuados
para la resolución de controversias entre las partes en el contrato
de construcción internacional. Ese procedimiento consta de tres
etapas principales.
Una primera
etapa en la cual la controversia ha de ser resuelta por el ingeniero. Si
la decisión del ingeniero no es aceptable para alguna de las partes,
la parte inconforme deberá solicitar la intervención del
Consejo de Resolución de Disputas (segunda etapa). Sí, una
vez conocida la decisión del Consejo de Resolución de Disputas,
la misma no satisface el interés de alguna de las partes entonces
se acude al arbitraje (tercera etapa).
Ese método
de resolución de controversias sin lugar a dudas permite una gestión
más eficiente de las disputas que se generan con motivo de las obras
o de la ejecución del contrato en general.
Estas cuestiones
se analizan desde una perspectiva práctica y profesional en la guía
de disputas de la construcción “Construction Claims Management”. |