Una de las
consecuencias del calentamiento global es el riesgo de sobrecalentamiento
en las viviendas. Hasta el punto que debería ser uno de los aspectos
más importantes a tener en cuenta a la hora de diseñar y
proyectar un edificio, ya sea de viviendas plurifamiliar, unifamiliar o
de oficinas.
Dicho diseño
tiene que valerse de medidas pasivas de sombreamiento (control solar dinámico,
etc.) entre otras, para combatir el riesgo de sobrecalentamiento y evitar
de esta manera el uso excesivo de medidas activas (refrigeración
y calefacción) para combatir sus consecuencias.
Cabe destacar
que el fenómeno de sobrecalentamiento no es exclusivo de climas
cálidos como el mediterráneo, sino que también se
da en países del centro y norte de Europa, aunque cobra mayor relevancia
en nuestra climatología ya que hay un alto grado de irradiación
solar, especialmente desde mayo a septiembre donde las temperaturas nocturnas
no permiten el enfriamiento gratuito nocturno.
Es por ello
que en la última década se han desarrollado varios métodos
para analizar el sobrecalentamiento y evaluar el confort térmico
dentro de la vivienda.
•?UNE-EN ISO
7730:2006 (RITE)
•?Estándar
Passivhaus
•?CIBSE TM52
El Laboratorio
de Control de Calidad en la Edificación del Gobierno Vasco ha presentado
un estudio que analiza el riesgo de sobrecalentamiento y el confort térmico
en un edificio de viviendas construido en 2014 y ubicado en Madrid, zona
favorable por presentar un clima dual con alta demanda de frío y
calor. El estudio ha ratificado que el sistema de fachada ligera Passivhaus,
con control solar dinámico y ventilación de alta eficiencia
permite conseguir hasta un 38% de ahorro en calefacción y un 54%
en refrigeración, y, en consecuencia, una menor emisión de
CO2 a la atmósfera.
La presentación
de este estudio, que es pionero en el sector, y que ha sido promovido por
Knauf Insulation, Griesser y Zendher, ha tenido lugar durante la celebración
de la 11ª Conferencia Española de Passivhaus (PEP), celebrada
del 13 al 15 de noviembre en el Forum Evolución de Burgos.
Este informe,
cuyos primeros estudios se remontan a 2018, compara, mediante una simulación
dinámica en un mismo bloque de viviendas, dos escenarios distintos:
el de un edificio base construido según el borrador de DB-HE 2018,
del Código Técnico de la Edificación (CTE), y otro
levantado con el sistema de fachada ligera Passivhaus de Knauf y Knauf
Insulation, control solar dinámico de Griesser y ventilación
de alta eficiencia Zehnder.
La simulación
refleja que el comportamiento del edificio mejorado con la fachada ligera
certificada por el Instituto Passivhaus es notablemente superior que el
EECN en base al CTE a lo largo de todo el año. Con esta solución,
se solucionan, según el estudio, tres de los cinco principios básicos
de este estándar de alta eficiencia energética: el aislamiento
térmico, la hermeticidad al aire y la ausencia de puentes térmicos.
“Se han realizado
una batería de 12 simulaciones dinámicas anuales, que permiten
analizar las distintas posibilidades de usuarios con mayor o menor uso
de ventilación natural y las diferencias entre viviendas en orientación
Norte o Sur”, explica Juan María Hidalgo, autor del estudio y experto
del Área de Térmica del Laboratorio de Control de Calidad
en la Edificación del Gobierno Vasco.
Este informe
ratifica, asimismo, que esta fachada desarrollada por Knauf y Knauf Insulation
permite conseguir hasta un 38% de ahorro en calefacción y un 54%
en refrigeración, y, en consecuencia, una menor emisión de
CO2 a la atmósfera durante la vida útil del edificio, y una
mayor eficiencia energética.
“El diseño
de un edificio en su fase más temprana teniendo en cuenta la orientación,
la protección de huecos mediante medidas pasivas como el control
solar dinámico y el aislamiento de la envolvente, es clave para
evitar las consecuencias del sobrecalentamiento, que se traducen en un
disconfort térmico y un elevado consumo energético en el
interior de la vivienda”, destaca Oscar del Rio, director general de Knauf
Insulation Iberia.
PROTECCIÓN
SOLAR
El control
solar dinámico y la ventilación de alta eficiencia aplicada
a este edificio de ocho alturas con 32 viviendas por planta más
una baja, mejora el confort térmico tanto en primavera como en otoño.
Según
Hidalgo, “la protección solar en los edificios construidos bajo
el CTE en los climas de la península es actualmente uno de los aspectos
más importantes para mantener el confort térmico. En los
edificios EECN o Passivhaus es todavía más importante”. Sobre
todo, continúa, “porque los EECN y Passivhaus tienen unos flujos
de calor más pequeños y una ganancia incontrolada del sol
que puede generar desequilibrios importantes y disconfort”. Es además,
si cabe más importante para conseguir edificios resilientes frente
al futuro clima más cálido en todo el Mediterráneo.
Arkaitz Aguirre,
gerente de Griesser, apunta la importancia de promover la integración
de las persianas graduables en los edificiones ECCN y Passivhaus, “ya que
mejoran el rendimiento energético de la envolvente transparente
favoreciendo el paso de luz natural al interior de los edificios”.
En este estudio
esta protección solar evita el sobrecalentamiento consiguiendo una
reducción media de ganancias solares del exterior de un 52% gracias
a las ventanas y a su envolvente traslúcida. Se consigue una protección
máxima del 96% en semanas cálidas.
Por su parte,
Pablo Maroto, director técnico y de marketing de Knauf Iberia, afirma:
“No hay duda de que hacer edificios más eficientes y confortables
es el camino hacia una arquitectura más sostenible. Esto no implica
un coste mucho mayor si tenemos en cuenta un retorno de la inversión
corto. No debemos olvidar que pasamos más del 80% en entornos cerrados
y tener en cuenta todos estos conceptos a la hora de proyectar un edificio,
nos ayuda a tener un mayor confort térmico y más saludable
si además utilizamos materiales adecuados junto con una correcta
ventilación”.
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