Asimismo,
es importante destacar que los recursos destinados a la Vivienda y el Fomento
de la Edificación por parte de la administración, desde el
año 2007, -época considerada como año en el que estalla
la crisis económica en España- hasta el 2018, se ven reducidos
en un 61,5% de, liderando el ranking también de la partida más
afectada negativamente del periodo. Los últimos datos de los presupuestos
generales del estado de 2018, ponen de manifiesto que únicamente
se destina el 0,1% del total, el fomento de la vivienda asequible, por
debajo de cualquier otra partida.
El nuevo Plan
Estatal de Vivienda 2018-2021 tiene dos grandes objetivos: contribuir al
incremento del parque de viviendas en alquiler y fomentar la rehabilitación
y regeneración urbana y rural. Por su cumplimiento, sería
necesario destinar más recursos económicos; como ejemplo
y en cierre del 2017, -último año del que se dispone información
estadística -, en España, se construyeron un total de 4.938
viviendas protegidas terminadas (calificaciones definitivas los planes
estatales y autonómicos publicados por el Ministerio de Fomento),
de los que el 79% del total, fueron construidas por parte de la promoción
privada, es decir, 3.902 viviendas sociales de promoción privada
y 1.036 de promoción pública. Únicamente, el 9% del
total de las viviendas terminadas en el ejercicio fueron protegidos, lejos
los porcentajes de viviendas sociales de otros países europeos,
con dotaciones superiores para el fomento de la vivienda protegida.
La APCE, considera
que el Plan Estatal de Vivienda 2018-2021 es un paso hacia una buena dirección
y destaca que después de casi seis años, urgía volver
a apostar por la promoción de nueva construcción de viviendas.
Sin embargo, el Plan, debería haber sido más ambicioso presupuestariamente,
ya que los recursos destinados para fomentar la construcción, son
insuficientes para cubrir las necesidades.
INCREMENTO
DEL PARQUE DE VIVIENDAS NUEVAS
La producción
de viviendas va claramente en incremento pero todavía nos encontramos
con cifras muy por debajo de las necesarias para atender la demanda. La
recuperación del sector es evidente y constante desde que en 2013
pero hasta llegar a las cantidades previstas de necesidades de hogares
todavía queda recorrido. El bajo nivel de la producción de
viviendas nuevas con una demanda crecen de esta tipología, hacen
que sea necesaria una producción más intensa para satisfacerla.
Sin embargo, las perspectivas para 2018 son buenas con una previsión
de 15.000 viviendas iniciadas, cantidad que supondría un incremento
de la actividad en torno al 28%.
En Cataluña,
con 10.891 viviendas iniciadas en los tres trimestres del año, representa
un incremento del 25,8% y su concentración, mayoritariamente, en
la provincia de Barcelona logrando el 79% del total iniciados en la comunidad.
Las cuatro
provincias muestran incrementos significativos destacando los de las provincias
menos productivas respecto del total, que son Tarragona y Lleida presentando
unos valores relativos de + 211,4% y + 187,4% respectivamente, en comparación
con el mismo período del año anterior. Le siguen la provincia
de Girona que pasa ligeramente de las 1.000 unidades iniciadas e incrementa
un 45,3% y por último, la provincia de Barcelona, que a pesar de
ser la que muestra un incremento relativo menor, del 14,2%, es la que tiene
más peso respecto del total (8.615 viviendas iniciadas en el periodo).
Las viviendas
terminadas en Cataluña prácticamente se han mantenido en
comparación con los acabados de un año antes, donde las disminuciones
de las provincias de Girona y Tarragona (-45% y 25,2% respectivamente)
han arrastrado la buena marcha del resto: la provincia de Lleida con una
evolución positiva de + 18,7% y Barcelona con + 15%. El resultado,
una valores absolutos de 5.329 viviendas terminadas en los tres primeros
trimestres del año y un mantenimiento de la producción del
0,3%.
Con estos datos,
se vuelve a poner de manifiesto que el mercado inmobiliario es totalmente
heterogéneo. Uno de los submercados donde la oferta más presiona,
es el de la provincia de Barcelona -motor de la actividad del sector en
Cataluña -y, en este sentido, cabe destacar el importante papel
de la ciudad condal, con un incremento del 72%, y una producción
de viviendas que representa el 20% de toda la actividad provincial y el
16,2% de la actividad en Cataluña, acumulando un total de 1.761
viviendas. La obra acabada de la ciudad de Barcelona (975 viviendas) incrementa
en un 17,5%.
EL 6,4% DEL
TOTAL DE POBLACIÓN OCUPADA TRABAJA EN LA CONSTRUCCIÓN
La población
ocupada en Cataluña ha sido de 3.393,9 miles de personas en el tercer
trimestre de 2018, cifra que muestra un incremento de los ocupados del
2,3% interanual. Todos los sectores muestran aumentos, destacando el 9,9%
de la agricultura, seguida de la industria (6,3%), los servicios (1,4%)
y la construcción que prácticamente se mantiene con un 0,2%
interanual.
Concretamente
el sector de la construcción, agrupa un total de 216,1 personas
ocupadas en el tercer trimestre del año. Teniendo en cuenta la situación
profesional, aumenta el número de asalariados en un 3,1% mientras
que disminuye el de no asalariados en un 5,3%. La construcción reúne
el 6,4% de la población total ocupada en Cataluña. Disminuye
el paro registrado en el sector de la construcción en un 13,9% en
diciembre e incrementan los afiliados al sector en un 7,6% en comparación
con el mismo mes del año anterior.
INCREMENTO
DE LAS VENTAS DE VIVIENDAS
Hasta el tercer
trimestre, en Cataluña se han registrado 61.543 compraventas, es
decir, un 2,8% más de operaciones que en el mismo periodo de 2017
(59.845 compraventas). Del total de viviendas vendidas, 9.292 corresponden
a viviendas nuevas y 52.251 corresponden de segunda mano.
El mercado
de la obra nueva en general en Cataluña, sigue remontando. Las ventas
de vivienda nueva incrementan por encima de los dos dígitos, concretamente,
hasta el tercer trimestre del año, han aumentado un 19% respecto
a las registradas en el mismo período del año anterior. Todas
las provincias registran una evolución con signos positivos de las
operaciones de obra nueva, con la excepción de Tarragona que continúa
la senda descendente con un -13,5%. Destacan el resto de provincias por
incrementos muy significativos: Lleida (+ 78,1%), Barcelona (+ 23,7%) y
Girona (+ 13%). Del total de operaciones registradas, el 66% de operaciones
registradas de esta tipología a la comunidad, pertenecen a ventas
realizadas en la provincia de Barcelona, con unos valores absolutos de
9.292 compraventas hasta terminar el tercer trimestre del año. Contrariamente,
es la provincia de Lleida la que en valores absolutos registra un número
inferior de compraventas, tanto de vivienda nueva como de vivienda usada.
En Cataluña, mientras las ventas de obra nueva continúan
con una trayectoria alcista recuperándose de una larga etapa de
disminuciones, la segunda mano, -que incrementaba constantemente - empieza
a suavizar su ritmo de crecimiento manteniéndose prácticamente
estable (0,4%). |