Finestrelles
Shopping Centre, que es el nombre del recinto comercial que abrirá
sus puertas al público próximamente, dispone de una superficie
39.250 metros cuadrados, generará 500 puestos de trabajo –los vecinos
de Esplugues serán contratados prioritariamente a través
de la bolsa de trabajo del Ayuntamiento–, cuenta con un aparcamiento subterráneo
de 1.250 plazas conectado directamente a la ronda de Dalt a través
de dos túneles y en su primer año de actividad prevé
recibir a ocho millones de visitantes. El consistorio de Esplugues coincidió
a Equilis los permisos para levantar este centro en 2016, coincidiendo
con la mejora generalizada de la situación económica, al
retomar el plan inmobiliario Caufec-Porta Barcelona.
A falta de
cinco meses para la inauguración, ya se ha comercializado alrededor
del 90% de la superficie comercial, que consta de 110 locales. Finestrelles
Shopping Centre contará con 60 marcas de moda –Zara, Bershka, H&M
o Mango entre algunas de las más destacadas– un hipermercado Alcampo
que ocupará una superficie de 4.200 metros cuadrados, un gimnasio
de la cadena Duet Fit, tiendas de Decathlon y Mediamarkt y diferentes franquicias
de restauración como McDonald’s, la Tagliatella o Starbucks. En
el plan inicial también se contemplaba que el centro comercial alojase
un multicines, pero de momento este proyecto se ha “aparcado”. “Las salas
de cine son un negocio singular y necesitan una oferta grande. Además,
asustó la competencia de otros centros con hasta 18 salas”, ha apuntado
el consejero delegado de Equilis en España, Víctor Gómez,
en referencia al Splau de Cornellá.
En 2017, Equilis
vendió 20.000 metros cuadrados de este proyecto inmobiliario a Temprano
Capital en los cuales se construirá una residencia para estudiantes
con 370 alojamientos que abrirá sus puertas a principios de 2019.
Emesa, sociedad de inversión de la familia Cuatrecasas, se hizo
con 37.000 metros cuadrados de oficinas en la misma zona por alrededor
de 15 millones de euros. Tanto Finestrelles Shopping Centre como la residencia
y las oficinas se sitúan, concretamente, en el barrio de Can Vidalet
de Esplugues en la confluencia de las principales vías de la entrada
norte de Barcelona, es decir, la Ronda de Dalt, la Avenida Diagonal y la
calle Laurea Miró.
El incremento
de la demanda de suelo por parte de agentes internacionales, especialmente
en el caso de las oficinas (ver despiece), comienza a tensionar el mercado
en Barcelona. El caso del distrito 22@ es paradigmático: desde 2015
se han contratado 75.000 metros cuadrados de suelo de oficinas y actualmente
la zona aloja a cerca de 9.000 empresas. Un buen ejemplo es el de la Torre
de Glòries, que ha atraído a gigantes tecnológicos
de la talla de Facebook o Dynatrace. Schibsted, con 8.000 metros cuadrados
de oficinas o King (9.000 metros cuadrados) también han decidido
instalarse en esta zona de la ciudad. Por el momento la situación
no parece haber tocado techo, y las previsiones que se manejan es que en
los próximos tres años, hasta el 2021, se añadirán
250.000 metros cuadrados de oficinas, lo que se traducirá en unos
25.000 puestos de trabajo más concentrados en este entorno.
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