El director
de Planeamiento y Gestión Urbanística, Juan Carlos Merino,
avanzó en la comisión de Desarrollo Urbano Sostenible que
el Ayuntamiento de Madrid reduce el número de viviendas previstas
en el plan director de los Desarrollos del Sureste a la mitad, de 105.000
inicialmente previstas a 53.000. La inversión municipal se reajustará,
de modo que el conjunto de inversiones municipales pasará de los
100 millones de euros al año a una media que se reducirá
a la mitad, 50 millones. Con el plan garantizan "el compromiso de inversión
por las administraciones para dotar de servicios públicos a esos
desarrollos" y evitar situaciones como las que, por ejemplo, se dan en
Las Tablas, con vecinos viviendo desde hace doce años pero es ahora
cuando el Ayuntamiento ha firmado un convenio con la Comunidad para construir
el reclamado instituto. Lo mismo sucede con centros de salud o comisarías.
Se trata de
evitar la existencia de "barrios invivibles como El Cañaveral".
"Esto se ha terminado: la construcción y desarrollo de las distintas
fases de esos ámbitos tiene que acompañarse del compromiso
presupuestario de las administraciones, municipal, regional y estatal,
que deben garantizar e incorporar en sus presupuestos esos fondos para
ejecutar las inversiones", ha argumentado José Manuel Calvo.
"No sólo
vale con hacer viviendas, hay que dotarlas de los servicios necesarios
para que los vecinos vivan en barrios y no en ciudades dormitorio sin servicios,
donde para cualquier gestión necesitan el coche", ha argumentado.
El delegado
ha destacado en la rueda de prensa la magnitud de los Desarrollos del Sureste,
la "mayor bolsa de suelo" de la ciudad con una superficie equivalente a
todo el espacio que encierra la M-30 o la que ocupa la ciudad de Barcelona.
El edil ha cargado contra un modelo de desarrollo "ajeno a las necesidades
sociales y ambientales" de Madrid. El Gobierno municipal ha puesto fin
a esto con iniciativas como la recuperación del demandado corredor
ecológico.
Calvo ha recordado
que todos los grupos municipales, excepto el PP, llevaban en los programas
electorales con los que concurrieron a las municipales de 2015 la revisión
de la Estrategia del Sureste al entender que ese tipo de desarrollos tenían
que ver "con un momento de burbuja y expansión descontrolada del
territorio".
José
Manuel Calvo ha recordado que la conclusión que se sacó del
estallido de la burbuja inmobiliaria es que "cuanto más suelo y
vivienda se ponía en el mercado, más subía el precio",
situación que se mantiene a día de hoy, con "uno de cada
dos trabajadores cobrando menos de mil euros, con un índice de paro
elevadísimo y sin posibilidad de acceder al alquiler". "Es una entelequia,
es absurdo pensar que se soluciona el problema por poner en carga más
suelo", ha defendido. La solución pasa por "una política
pública de alquiler social".
Calvo ha concretado
que Madrid tiene suelo finalista para los próximos ocho años,
con los estudios que obran en poder del Ayuntamiento y con el ritmo de
concesión de licencias. Todo eso sin contar con Berrocales, Ahijones
y Chamartín, unido a que hay suelo vacante en El Cañaveral,
Valdebebas y en el PAU de Vallecas.
En la postura
contraria se encuentran las Juntas de Compensación (formadas por
los propietarios de los suelos donde hasta ahora estaba prevista la construcción
de casi 105.000 casas nuevas), cuyo principal reclamo es recibir el visto
bueno por parte de la Administración Pública, tras el respaldo
del Tribunal Supremo en 2016, para poder levantar las viviendas al ritmo
que marque la demanda del mercado.
En línea
con la tesis de los dueños de los terrenos también está
el sector de la promoción residencial y algunas entidades financieras,
que alertan de que la decisión del Gobierno municipal de eliminar
miles de viviendas asequibles en Madrid tendrá un impacto directo
en los precios.
Y, por último,
está la Plataforma por un Sureste de Madrid limpio y sostenible,
donde se engloban diferentes organismos como asociaciones vecinales y Ecologistas
en Acción, que se oponen tanto al Ayuntamiento como a los dueños
del suelo. En su opinión, la vivienda nueva debería crecer
lo mínimo posible en la ciudad mientras sigan existiendo desarrollos
y viviendas vacías, por lo que su propuesta es que toda la superficie
que ocupan estos desarrollos (unos 37 millones de m2) sea un gran espacio
verde que sirviera de pulmón a la ciudad en estos tiempos, marcados
por unos elevados índices de contaminación.
La reacción
de los dueños de los terrenos ante la estrategia del Gobierno municipal
no se ha hecho esperar. Desde las Juntas de Compensación afirman
que estudiarán el texto definitivo que apruebe el Ayuntamiento (hasta
ahora solo han podido consultar un borrador) para tomar las medidas legales
y jurídicas que consideren oportunas.
A la espera
de definir la respuesta final, prevén pedir a la justicia que tumbe
la propuesta del equipo de Manuela Carmena (sobre todo después de
que el Supremo avalara el desarrollo en 2016) y en paralelo exigir una
indemnización para compensar a los afectados. Y, teniendo en cuenta
que ya se han invertido en torno a 400 millones de euros en la zona, todo
apunta a que la indemnización será cercana a esa cifra.
Frente a las
quejas de las Juntas de Compensación y su intención de acudir
a los tribunales para exigir indemnizaciones, el concejal de Urbanismo
ha confirmado que el Ayuntamiento ha meditado la situación en la
que se encuentran, diferenciando la situación entre Los Berrocales
y Los Ahijones, que no han sufrido alteraciones frente al plan inicial
y donde la inversión supera los 260 millones de euros, a la de Los
Cerros o Valdecarros, donde “no se ha movido un adoquín”.
“Son desarrollos
que no han sido capaces de poner en marcha, tal vez porque estaban mal
planificados de origen”, ha aseverado Calvo, quien ha insistido en que
“el Ayuntamiento de Madrid cada vez que da un paso de estas características
piensa en las compensaciones de costes”.
Además,
el concejal de urbanismo ha destacado que el plan director unirá
la ejecución de los planes de desarrollo al compromiso de inversión
por parte de las Administraciones para dotar de servicios públicos
a estos nuevos barrios. Es decir, hasta que el Ayuntamiento y la Comunidad
de Madrid no incluyan en sus presupuestos las partidas necesarias para
asumir el coste de las infraestructuras de la zona no se permitirá
el inicio de ninguna vivienda. Justo al contrario del proceso habitual:
primero se construyen las casas y después los poderes públicos
empiezan a dotar de servicios el área nueva, como ha ocurrido en
los PAUs del norte.
De hecho, la
inversión municipal prevista se reajusta de los 100 millones de
euros al año a unos 50 millones tras la reducción de la edificabilidad
de este entorno que equivale a la ciudad de Barcelona. El nuevo Plan Director
también recoge la creación de un corredor ecológico
en la zona.
“No vale solo
con hacer viviendas también hay que dotarlas de los servicios necesarios
para hacerlas ciudades sostenibles”, ha recalcado José Manuel Calvo,
que ha puesto como ejemplo de ciudad dormitorio la situación de
Las Tablas: un desarrollo que lleva 12 años en pie y que ahora consigue
la construcción de su primer instituto.
ANTECEDENTES
20 de diciembre de 2017
NOTICIA
ADAPTADA AL SISTEMA EDUCATIVO inmoley.com DE FORMACIÓN CONTINUA
PARA PROFESIONALES INMOBILIARIOS. ©
PLAN DIRECTOR
DEL DESARROLLO DEL SURESTE DE MADRID
¿Qué
aprendo?
• Se analiza
en la guía práctica inmoley.com de Urbanismo de Madrid
Convertir
conocimiento en valor añadido > Herramienta práctica >Guías
prácticas
• Los alumnos
deberán remitir a su tutor un análisis sobre los efectos
prácticos para las juntas de compensación de Los Cerros y
Valdecarros
Los efectos
prácticos para las juntas de compensación de Los Cerros y
Valdecarros, ya que este plan director conlleva su disolución y
la consecuente paralización de todo el desarrollo, lo que permite
anticipar un proceso judicial contra la decisión del ayuntamiento.
El Ayuntamiento de Madrid ha presentado el documento definitivo del plan
director para los desarrollos del sureste de Madrid de Valdecarros, Berrocales,
Ahijones y Los Cerros donde está previsto construir alrededor de
105.000 viviendas. Se trata de racionalizar la propuesta para introducir
progresividad y no realizar grandes proyectos de forma simultánea.
En su lugar, se aboga un desarrollo “secuenciado” para ir tramitando proyectos
una vez se consoliden los anteriores. Ahora, ese plan se tendrá
que aprobar por la Junta de Gobierno para que sea oficial. Se pretende
eliminar las juntas de compensación (organismo que agrupa a los
propietarios encargado de la urbanización) de Los Cerros y Valdecarros,
que volverían a constituirse de nuevo cuando las necesidades de
vivienda de la ciudad implicaran necesidad de desarrollar estos ámbitos.
Esas mismas
fuentes indican que las condiciones del Ayuntamiento son “muy duras” para
los 1.000 propietarios de terrenos en los ámbitos del sureste y
“difícilmente asumibles” para parte de ellos.
En septiembre,
los gerentes de estas juntas anunciaron que podrían tomar medidas
legales contra el equipo de Carmena si se consumaba el retraso ya que han
invertido 400 millones en la urbanización.
Desde estas
juntas de compensación se explicó que el ayuntamiento propone
disolver las juntas de compensación de Valdecarros y Los Cerros,
así como la modificación del planeamiento de Berrocales y
Ahijones, "lo que supondrá la paralización de todos estos
desarrollos por un largo periodo de tiempo". Por otra parte, "la disolución
de las juntas de compensación de Valdecarros y Los Cerros obligaría
a una modificación del Plan General Urbanístico, lo cual
deberá ser aprobado en último término por la Comunidad
de Madrid", añadieron.
EN DETALLE
El Ayuntamiento
de Madrid ha decidido ya el Plan Director del Desarrollo del Sureste y
ha decidido que el número de viviendas quede reducido a una tercera
parte, además de rebajar la superficie total y de introducir varias
modificaciones de planeamiento.
Así
se lo comunicó el concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, José
Manuel Calvo, a las juntas de compensación de esta gran bolsa de
suelo, formada por los ámbitos de Berrocales, Cerros, Ahijones y
Valdecarros, en una reunión celebrada el pasado martes por la tarde.
En este
encuentro, al que también asistió el director general de
Planeamiento, Carlos Lasheras, el ayuntamiento dio a conocer su propuesta
final, tras un año de mesas de negociaciones, la cual cuenta con
el respaldo del Partido Socialista (PSOE) y contempla cercenar de 105.000
a 38.708 el número de viviendas en toda esta área.
El Ayuntamiento
ha decidido convocar unas mesas para transformar el marco de Los Berrocales,
Los Cerros, Los Ahijones y Valdecarros
La mayoría
de las nuevas vivienda (20.000) serán protegidos, con 1.500 viviendas
que irán dirigidas a proyectos de integración social de la
Comunidad de Madrid.
Los propietarios
de los terrenos, que ya habían mostrado su disposición a
acudir a los tribunales, dejaron clara su oposición y su sensación
de que estas mesas apenas han sido un teatro para dilatar una decisión
que, consideran, el ayuntamiento ya tenía tomada hace 12 meses.
Además
del drástico recorte del número de viviendas, la propuesta
del ayuntamiento contempla desclasificar dos millones de metros cuadrados
de suelo que iban a ser zonas verdes, lo que significa dejarlos fuera al
declararlos no urbanizables. Esto tendrá un impacto directo en las
arcas públicas, ya que el ayuntamiento deberá pagar a los
promotores el dinero que llevan invertido en ellos.
EL CAÑAVERAL
Según
cálculos del ayuntamiento, desde el inicio de las actuaciones, las
juntas de compensación han invertido 322 millones, con un fuerte
desequilibrio entre lo efectuado por Los Berrocales y Los Ahijones (259
millones) y lo invertido por Valdecarros y Los Cerros (63 millones), una
relación 80/20 frente a un reparto 36/64 de la superficie de suelo.
El plan
director contempla continuar la urbanización de Los Berrocales y
Los Ahijones, pero con varias modificaciones de sus instrumentos de planeamiento
y del convenio del primero, lo que tendrá impacto tanto en los tiempos
del desarrollo, que seguirá retrasándose, como en las responsabilidades
económicas.
En el caso
de las juntas de compensación de Los Cerros y Valdecarros, este
plan director conlleva su disolución y la consecuente paralización
de todo el desarrollo, lo que permite anticipar un proceso judicial contra
la decisión del ayuntamiento.
En su defensa,
el ayuntamiento sostiene que tiene la potestad del planeamiento y que sus
prioridades están en dotar los equipamientos y servicios del Ensanche
de Vallecas y El Cañaveral, otros dos ámbitos del Desarrollo
del Sureste que ya están consolidados, y dinamizar los suelos de
los polígonos industriales ya ejecutados en Vallecas-La Atalayuela,
La Dehesa y Vicálvaro.
|