En total se trata de 1.606 viviendas y 430 locales comerciales que deberán pasar inspecciones periódicas para determinar su actual estado de conservación y garantizar que los trabajos que se ejecuten bajo la superficie no afecten a la seguridad de estas fincas. Para ello, el Ayuntamiento ha licitado por valor de casi un millón de euros los servicios de inspección entre las calles Badajoz y la Rambla del Poblenou que corresponderían a la segunda fase del túnel. Se da la circunstancia de que en este tramo hay una mayor concentración de viviendas que en la zona de la plaza, donde ya se realizaron trabajos de auscultación e inspección utilizando métodos muy novedosos, ya que el túnel en este punto discurre a gran profundidad, muy por debajo del nivel freático. En la plaza se utilizaron cámaras que monitorizaron los edificios durante la obra con el fin de controlar que no se producían movimientos en el terreno.

La inspección también afectará a las líneas T5 y T6 del tranvía que transcurren por la Gran Via. En este caso, se hará un control periódico mediante nivelación de la vía para vigilar de esta manera que la excavación del túnel no afecte al servicio. Además, entre los edificios que deberán ser inspeccionados, se encuentra el centro comercial Glòries y el edificio 22@ de la calle Llacuna, que es de oficinas.

El plan de inspecciones que está en fase de licitación señala que las fincas situadas en la Gran Via, hasta la Rambla del Poblenou, se encuentran en buen estado de conservación. Puede decirse que la mayoría de ellas son construcciones relativamente jóvenes y que no presentan problemas estructurales previos a las obras. Aun así, se apunta que, al encontrarse a tan sólo unos 10 y 15 metros de la excavación, el riesgo de que pueda producirse algún movimiento de tierras es medio-alto, según las evaluaciones previas realizadas por los técnicos.

La segunda fase de construcción del túnel tendrá una duración de 32 meses. La auscultación de todas las fincas afectadas se iniciará un mes antes de empezar los trabajos de construcción y se prolongará dos meses después del final de obras para controlar movimientos posteriores.

Este tramo del túnel se construirá mediante pantallas profundas con pilotes sobre los que se ejecutará la cubierta superior para luego proceder a la excavación de la tierra. Una vez que se excave el túnel, se realizará el resto de las actuaciones como el drenaje, la losa inferior, las instalaciones y, por último, los acabados. Está previsto que las obras comiencen por el lado mar de la Gran Via, según recoge el proyecto.

Otra de las cuestiones que se abordan es la desviación del tráfico en esa zona mientras duren los trabajos. En este caso se prevé utilizar las mismas alternativas viarias que, durante los meses en los que Glòries estuvo en obras, se incorporaron para encauzar el tráfico. Así las cosas, los vehículos que circulen por la Gran Via y por las arterias próximas a la zona afectada serán desviados por las calles Lepant, Sancho de Ávila y Llacuna en sentido mar, mientras que en la entrada a Barcelona los coches circularán por la calle Ciutat de Granada, y regresarán a la Gran Via de nuevo por la calle Padilla. La avenida Diagonal también podría ver afectado el tráfico por las obras de construcción del túnel en el tramo final y el Ayuntamiento prevé desviar el tráfico por la calle Consell de Cent y Bilbao, en sentido Besòs, y por Bac de Roda y Aragó, de entrada a la ciudad.

ANTECEDENTES

El Consejo de Administración de la empresa municipal BIMSA aprobó la adjudicación de las obras de los túneles viarios en la plaza de las Glòries entre las calles Badajoz y Castillejos por un importe de 49.675.740 euros (IVA excluido) a la UTE formada para las empresas Romero Gamero, SAU + Benito Arnó e Hijos, SAU + Copisa Constructora Pirenaica, SA y COMSA, SAU. Se trata de la primera fase de los túneles viarios que se ejecutarán en dos fases y que canalizarán el tráfico de entrada y salida de la ciudad por debajo de la plaza de las Glòries, según la nueva configuración viaria prevista en la remodelación del ámbito y que deben permitir la creación de un importante foco de nueva centralidad articulado alrededor del conjunto de equipamientos de la plaza, nuevos y existentes y la sustitución del anillo vial para una nueva vialidad en túnel y superficie, con el consecuente ganancia de la gran parque-plaza CANopen Urbana.

El soterramiento del tráfico de Glòries es uno de los compromisos asumidos en el Compromiso por Glòries 2007 y que se ha trabajado con los vecinos para garantizar la movilidad en la zona, una vez derribada la anilla viaria, gracias por una parte a la nueva configuración viaria en superficie que se ha diseñado en forma de super isla y del otro, enterrando el tráfico de la Gran Vía, para garantizar que a medio plazo la plaza se convierte en el gran parque urbano Canòpia Urbana.

El proyecto define la construcción de los Túneles de carretera que canalizarán el tráfico de entrada y salida de la ciudad por debajo de la plaza de las Glòries, según la nueva configuración viaria prevista en la remodelación del ámbito.

FASES DE LA OBRA

Se trata de dos tubos independientes con circulación unidireccional que seguirán el trazado de la Gran Vía, bajo las infraestructuras ferroviarias existentes en el subsuelo. Se trata de unos túneles urbanos, con una longitud total de 957 metros, que recogerán el tráfico de la Gran Vía, con una IMD media de 90.000 coches / día.

La actuación se ejecutará en dos fases: la primera, los túneles en el tramo Castillejos-Badajoz y la segunda, los del tramo Badajoz-Rambla del Poblenou.

Los túneles seguirán el rastro de Gran Vía y pasarán por debajo de los 4 túneles existentes: L1 Metro, R1 línea de Maçanet -Massanes, R3 / R4 (líneas de Manresa y Puigcerdà) y la línea de Estación de Francia-Santos. Se conciben como dos tubos independientes con circulación unidireccional y se prevé construirlos en dos fases.

1 ª fase (longitud 508 m) Túnel Castillejos- Badajoz, con bocas en la calle de Los Castillejos ya mitad de la isla Badajoz- Ciudad de Granada. Será el tramo más profundo, ya que pasará por debajo de los túneles ferroviarios y llegando a 25 metros bajo la rasante de la plaza.
2 ª fase (longitud 449 m) Túnel Badajoz-Rambla del Poblenou, tramo completamente rectilíneo y simétrico en ambos sentidos que discurrirá a una profundidad de unos 10 m por debajo de la rasante de Gran Via. Habrá salidas de evacuación directas en el exterior, distanciadas a menos de 200 my construidas con pantallas.

La obra, que se deberá ejecutar con cargo al presupuesto de inversión municipal (PIM) tiene un presupuesto total previsto de € 170 087 172 (IVA incluido). La duración de las obras de la primera fase del túnel es de 24 meses. Y la duración de segunda fase del túnel comportará también 24 meses de obras. El objetivo del gobierno es poder empezar las obras el primer semestre de 2015, de acuerdo con el compromiso asumido con vecinos y grupos políticos.Las obras de los dos tramos de túneles de las Glòries empezarán a principios del 2018 y tendrían que acabarse el primer trimestre del 2021. La construcción del segundo tramo y la urbanización de la superficie, reivindicada por el vecindario, permitirá unir el barrio del Clot con el del Parc i la Llacuna del Poblenou y el de Proveçals del Poblenou.

La licitación conjunta de los dos tramos de túneles permitirá acortar los plazos de ejecución de las obras de Glòries. Ya se ha encargado la actualización del proyecto que prevé, por una parte, la finalización de las obras del tramo que ya estaba en construcción, entre las calles de Los Castillejos y Badajoz, y por la otra, el proyecto para el tramo entre la calle de Badajoz y la rambla del Poblenou.

El objetivo es licitar las obras de los dos túneles en octubre y poder empezar las obras a principios del 2018 y poder acabarlas durante el primer trimestre del 2021.

La nueva licitación se efectuará por lotes para evitar complicaciones futuras. En primer lugar, para que el importe total, de 100 millones de euros, genere una presión excesiva en las ofertas y provoque bajas que acaben resultando temerarias.

En segundo lugar, la división por lotes también hará que ninguna empresa tenga el control sobre toda la obra y así se asegure una fiscalización mejor de los trabajos.

Al importe de 100 millones de euros de construcción de los dos tramos del túnel se tendrán que sumar 31 millones para las instalaciones y los servicios.

La construcción de todo el túnel vial, una infraestructura reivindicada por el vecindario, y la urbanización en la superficie coserán el barrio del Clot y los del Parc i la Llacuna del Poblenou y de Provençals del Poblenou. Estos barrios ganarán en conjunto 10.000 metros cuadrados de espacio verde, a los cuales se añadirán las 12 hectáreas del gran parque central que a principios del 2018 empezará a construirse en la plaza de las Glòries.