Además,
Kennedy Wilson quiere invertir otros 10 millones de euros para convertir
el inmueble en un centro comercial de lujo. Al final año pedirá
al Ayuntamiento de Madrid el cambio de uso del edificio, que con seis pisos
y 2.200 metros cuadrados, ahora tiene destino residencial.
"Una vez recibida
la autorización, se comercializará el inmueble entre marcas
de alto nivel que buscan un emplazamiento singular", afirma Kennedy Wilson.
La intención del fondo es alquilar todo el inmueble a una sola marca
para que instale una gran tienda.
Mary Ricks,
consejera delegada de Kennedy Wilson Europe (filial londinense del fondo
californiano) afirma que "la adquisición en la Puerta del Sol añade
este renombrado destino turístico, equivalente madrileño
al Piccadilly Circus en Londres, a nuestra cartera".
El fondo ha
efectuado la operación a través de su alianza en España
con Renta Corporación, por la que esta firma asume un 10% de la
inversión y se encarga de gestionar la propiedad. El año
pasado, compraron otro edificio en Madrid por 10 millones.
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