Una de estas
parcelas, de 6.000 metros cuadrados, fue adjudicada a Autos Carretero por
un montante de 461.800 euros y tiene previsto instalar en la zona «un
gran centro de distribución de vehículos e investigación».
Otra de las parcelas, de 1.000 metros cuadrados, fue adjudicada por 109.000
euros a la empresa Anisa, dedicada al pienso y a la «investigación
para alimentación del ganado», mientras que de la tercera
(900 metros cuadrados) se encargará la empresa Garoc, que resultó
adjudicataria por 75.291 euros y creará un centro de montajes de
alta tensión.
El concejal
de Urbanismo, Pedro Martín, indicó que Ciudad Real es «una
ciudad de oportunidades» y que las empresas quieren asentarse en
ella, «incluso pagando el suelo». Destacó la ubicación
del polígono avanzado, próxima a las autovías y al
AVE, y los puestos de trabajo que crearán las futuras empresas que
se asentarán en la zona.
En cuanto a
la finalidad que tendrá el dinero que llegará a las arcas
municipales fruto de la venta de esas parcelas, el concejal aseguró
que «es posible» que suponga «una parte del dinero o
que sea suficiente para una nave industrial de los servicios municipales».
Martín
comentó que se reservó entonces una parcela de 12.000 metros
cuadrados para edificar dicha nave, aunque posteriormente «se paralizó»
el proyecto y se segregó el suelo para hacer un proyecto «totalmente
óptimo» y de unas dimensiones más reducidas. Así,
la futura nave se asentará sobre una parcela de 6.000 metros cuadrados,
el doble de la existente en la actualidad, dijo Martín.
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