5 de febrero
de 2015
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EL AYUNTAMIENTO DE ZARAGOZA ACERTÓ
AL DENEGAR LA DECLARACIÓN DE RUINA URBANÍSTICA.
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Guía práctica inmoley.com de ruina edificatoria y urbanística.
El Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) ha sentenciado
a favor del Ayuntamiento de Zaragoza que denegó una solicitud de
ruina del edificio del antiguo Café Madrid, de modo que han de ejecutarse
las necesarias obras de conservación, unas obras de consolidación
exigidas en 2007. El inmueble, ubicado en la confluencia entre la avenida
de Madrid y el paseo María Agustín de la capital aragonesa,
presenta “graves deficiencias” en su estructura y fachada, tal y como dejó
claro un informe elaborado por los técnicos de Urbanismo. El edificio
se trata de un bien protegido por el Plan General de Ordenación
Urbana.
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De ahí que el Ayuntamiento
solicitase a la propiedad (repartida entre el Banco Santander y pequeños
propietarios) la puesta en marcha de obras de conservación, inicialmente
valoradas en 2,8 millones de euros. Finalmente se estableció que
esas obras podían ser sensiblemente menores, suficientes para garantizar
la seguridad del inmueble y de los peatones que utilizar la acera circundante.
Estos trabajos fueron valorados
en 400.000 euros, y se estudió la posibilidad de llevarlos a cabo
mediante ejecución subsidiaria: es decir, el Ayuntamiento las acometería
y pasaría después la factura a los propietarios. Mientras
tanto, los propietarios insistieron en la declaración de ruina del
edificio, un extremo rechazado por el TSJA.
Estos días se están
llevando a cabo labores de desescombro del interior del antiguo Café
Madrid, lo que ha obligado a cortar un carril en la avenida de Madrid.
El edificio en cuestión sufre
desde hace años los achaques del abandono y el deterioro. Tras varios
cambios, el actual propietario mayoritario es el Banco Santander, al que
se suman otros más 'pequeños', como el restaurante Casa Emilio
o el Grupo Artal. Los intereses de la entidad bancaria no siempre han sido
los mismos que los del resto de dueños, por lo que el futuro del
inmueble nunca ha estado del todo claro.
Desde el Ayuntamiento se ha intentado,
hasta ahora sin éxito, la ejecución de mejoras en el edificio,
en especial en la fachada y la cubierta, donde se registraron desprendimientos
que ponían en riesgo la integridad de los peatones. Las mallas protectoras
acumulaban cascotes peligrosos, en especial en los días de más
viento.
De ahí que el informe de
Urbanismo señalara que “procede requerir con carácter de
inmediato a la propiedad que se adopte con carácter de urgencia
cuantas medidas de seguridad se consideren oportunas a fin de garantizar
la seguridad estructural de la fachada”.
El edificio se construyó
en 1889 y es un valioso ejemplo la arquitectura del siglo XIX. Pero sus
mejores año ya pasaron y el cierre del Café Madrid en 1997
agravó su situación de abandono. Se procedió a apuntalar
el inmueble y a colocar la citada malla protectora, pero poco más
se ha avanzado. Incluso los vecinos critican la presencia de ratas y otro
tipo de animales que en ocasiones salen a la calle. También ha sufrido
inundaciones, incendios e intrusiones de personas ajenas a la propiedad.
ANTECEDENTES MAYO DEL 2007.
El 7 de abril, la empresa Desarrollos
Inmobiliarios Artal envió un escrito al ayuntamiento solicitando
la declaración de ruina de los edificios situados en la confluencia
de la avenida de Madrid (números 1, 3 y 5) con el paseo María
Agustín (81), un inmueble catalogado en cuyos bajos se ubicó
el conocido Café Madrid.
Era la segunda vez que los propietarios
reclamaban este trámite (que permitiría derribar el edificio
y construir uno nuevo), puesto que el 13 de septiembre del 2005 el Consejo
de la Gerencia de Urbanismo ya resolvió no autorizar esa declaración.
Los dueños no recurrieron el acuerdo, por lo que adquirió
firmeza. En ese mismo expediente se reclamaba la ejecución de una
serie de obras de consolidación y conservación del inmueble.
En el 2006, después de que
el consistorio amenazase con ejecutar las reparaciones subsidiariamente
y pasarles después la factura a los propietarios, se acometieron
unos pequeños trabajos de saneamiento, refuerzo y pintado de la
fachada.
No obstante, según el informe
técnico del Servicio de Inspección, con fecha 31 de mayo
del 2007 se requirió nuevamente a la propiedad y a fecha de hoy
las obras no han sido ejecutadas por completo. Por este motivo, se insta
al equipo de gobierno PSOE-PAR y al resto de partidos de la oposición
a inadmitir a trámite la solicitud de declaración de ruina
del antiguo Café Madrid.
Este establecimiento ocupaba la
fachada del número 81 del paseo María Agustín, pero
acabó hace ya unas décadas en manos de una promotora. Desde
entonces, el grupo empresarial Artal fue adquiriendo poco a poco las viviendas
y los locales de los portales de la avenida Madrid, hasta ir completando
toda la manzana. Este proceso de compra paulatina y no rehabilitación
se tradujo en el deterioro progresivo de toda la esquina, mientras que
la parte correspondiente al local número 5 de la avenida Madrid
(donde se encuentra el restaurante Casa Emilio) y varias viviendas más
seguía activa. Ese tramo no lo acondicionó por falta de acuerdo
con el grupo Artal, de ahí que Urbanismo reclame la ejecución
de la obra. El edificio se construyó en 1889 y está catalogado
por su interés arquitectónico.
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