| Domo Gestora
ha logrado reunir a miles de cooperativistas que acceden a una vivienda
con un precio inferior al de la zona en que se construye. «El éxito
de la cooperativa es no funcionar como una promotora y hacer casas por
debajo del precio del mercado; así, si sale un cooperativista, se
le puede sustituir. En el caso de Raimundo Fernández Villaverde
(a escasos metros de la Castellana), es un 30% más barato»,
señalaba Feliciano Conde, presidente de Domo, en declaraciones al
periódico Expansión.
En la actualidad,
la gestora desarrolla con mil cooperativistas nueve desarrollos en Madrid
–«es donde está la demanda más fuerte»–, aunque
también estudian oportunidades en Sevilla y Málaga. «Nuestros
primeros proyectos han sido difíciles, pero estamos especialmente
orgullosos de ellos porque hemos demostrado que se puede hacer vivienda
de lujo en cooperativa». Sus proyectos cuentan, por ejemplo, con
calefacción en suelo radiante y materiales, carpinterías
y acabados de lujo. «Además, los cooperativistas pueden adaptar
su vivienda antes de construir sin gasto adicional, algo que la promotora
siempre te va a cobrar».
Con la crisis,
las gestoras de cooperativas han tomado el relevo de las grandes promotoras.
«Al no necesitar el margen del promotor, podemos ofrecer más
por un suelo. En las cooperativas no existe especulación, la ley
que las regula no lo permite. No existen pases de suelo, que hacen mucho
daño al sector, ni existen pases de viviendas; si sale un cooperativista
entra otro con el mismo precio», asegura.
Además,
estos proyectos logran el apoyo financiero a la construcción de
viviendas, muy restringido en estos momentos. «Ahora, los proyectos
son totalmente seguros porque los bancos sólo dan financiación
a los gestores solventes, con controles muy altos».
Entre las iniciativas
hay varias en suelos que controlaban administraciones públicas.
«El primero fue el de Guatemala (en la antigua sede de Gerencia de
Madrid), en un suelo que estaba desierto al no poder terminarlo una promotora.
Se vio que sólo era viable con una cooperativa», subraya.
«Estamos a punto de entregar unos chalets en Tres Cantos y otra promoción
en Vallecas que estaba inacabada por la EMVS y nosotros la hemos hecho
posible».
Otra promoción
de Domo en régimen de cooperativa es el proyecto residencial de
Paseo de La Habana 75 será uno de los más exclusivos y lujosos
que se promuevan en la capital en los próximos tiempos. La parcela
de Paseo de La Habana 75, propiedad de la Sociedad Estatal de Gestión
Inmobiliaria de Patrimonio SA (Segipsa) y de 1.471,54 metros (2.258 edificados
en tres plantas sobre rasante y una semisótano), salió a
subasta el 7 de septiembre y los interesados pueden presentar su oferta
por escrito en sobre cerrado hasta el 13 de octubre. El día 22 del
mismo mes se abrirán dichos sobres. El precio de salida asciende
a 6,74 millones de euros.
Otro protagonista
es el grupo Ibosa, uno de los principales operadores inmobiliarios de Madrid,
con una presencia muy destacada en Valdebebas y con proyectos en marcha
tan destacados como el que se construirá sobre el terreno que ocupan
las cocheras de Metro en Cuatro Caminos.
Tras haber
explotado con éxito durante los últimos años la gestión
de cooperativas para producir viviendas de gama alta, la compañía
ha decidido dar un salto hacia la gama más exclusiva del mercado
yacaba de lanzar Línea Privilege, una nueva área de negocio
con la que pretende desarrollar hogares de alto standing en las ubicaciones
más selectas y con demanda del más alto poder adquisitivo.
"Creemos que
es la fórmula perfecta para que el cliente prime pueda diseñar
su casa a medida, participando en la toma de decisiones del desarrollo
de la promoción, al tiempo que obtiene su vivienda a un riguroso
precio de coste. Una posibilidad que hasta ahora no existía en el
mercado para este tipo de compradores", explica Leopoldo Moreno, consejero
delegado de Ibosa, en declaraciones al periódico el Mundo.
El primer proyecto
de esta nueva línea de negocio se va a materializar en una promoción
que, bajo el nombre Alhena Valdemarín y a modo de proyecto piloto,
se
desarrollará en una parcela de 23.327 metros cuadrados con vistas
al skyline de Madrid, en Aravaca, uno de los entornos residenciales más
exclusivos de la capital.
Se trata de
un residencial que contará con 36 viviendas de tres a cinco dormitorios
y entre 170 y 450 metros cuadrados construidos que, según informa
Ibosa, tendrán un coste que partirá de los 3.850 euros por
metro cuadrado. Esto significa que saldrán a la venta desde 680.000
euros (más IVA), con dos plazas de garaje y un trastero incluidos.
Además
de por su emplazamiento, su diseño y sus calidades, la promoción
destaca por contar con unas zonas comunes del máximo nivel, con
piscina de adultos e infantil, pista de pádel, pista polideportiva,
pitch&putt, gimnasio, gastroteca, sala social, zona de recreo infantil
y párking de visitas.
La idea de
Ibosa es seguir sacando al mercado promociones de este tipo "en un futuro
próximo", tanto en zonas similares a la de este primer proyecto,
"como en enclaves más urbanos", asegura Moreno. "No descartamos
incluso la rehabilitación de edificios en zonasprime del centro,
aunque en este caso las dotaciones y áreas comunes tengan que tener
características diferentes".
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