26 de marzo
de 2014
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NUEVOS MATERIALES PARA LA EDIFICACIÓN DEL FUTURO.
Convertir conocimiento en
valor añadido:
Guía práctica inmoley.com de oficios y materiales de la edificación.
El sugru es un nuevo material que se puede formar por la mano. Se adhiere
a la mayoría de los materiales y se convierte en una sujeción
de silicona sólida. Otro material novedoso es el nácar artificial
capaz de soportar temperaturas de hasta 600 grados centígrados,
mientras que los polímeros solo aguantan 300 °C.
Herramienta práctica
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prácticas
EL SUGRU
Es nuevo tipo de silicona con propiedades
de elastómero. La prueba de fuego fue el proceso más dificil
al que se sometió Sugru.
Sugru se comerciliza empaquetado
al vacío. A partir del momento de su apertura, se puede moldear,
como si fuese plastilina, durante treinta minutos, para adaptarlo a la
forma deseada. Un día después, el material se endurece.
En ese sentido, Sugru puede adherirse
a superficies de aluminio o plásticos tipo ABS, presentes por ejemplo
en las carcasas de los televisores o en los elementos externos de los automóviles.
Además, es resistente al agua y puede soportar temperaturas en un
rango desde los -60 hasta los 180 °C.
OTROS DESCUBRIMIENTOS. EL NÁCAR
ARTIFICIAL
Un equipo de investigadores franceses
ha logrado fabricar un nuevo material diez veces más tenaz que la
cerámica e inspirado en el nácar de los haliótidos,
pequeños moluscos conocidos también con el nombre de «orejas
de mar». Este decubrimiento aparece en la revista científica
«Nature» y del que ha informado el Centro Nacional de Investigaciones
Científicas de Francia (CNRS), abre la posibilidad a que el nuevo
material se aplique industrialmente en numerosas áreas, por ejemplo,
para reducir el tamaño de las piezas cerámicas en los motores
o en sistemas de blindaje.
Su característica principal
es su capacidad para soportar una fisura sin romperse, pues resulta hasta
diez veces más tenaz que la cerámica tradicional o artificial,
combinada con aluminio.
Este nácar artificial
es capaz de soportar temperaturas de hasta 600 grados centígrados,
mientras que los polímeros solo aguantan 300 °C.
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