CONSTRUCCIÓN, LA REHABILITACIÓN SE HACE SITIO EN EL NEGOCIO DE LA EFICIENCIA ENERGÉTICA
Valor añadido: Según expertos reunidos en la Jornada “Rehabilitación y Sostenibilidad en las Ciudades Meridionales”, organizada por el Centro Superior de Edificación, los especialistas apuestan por invertir en la industrialización y profesionalización del sector para competir a la altura de los países líderes como Alemania y Reino Unido. Barcelona, Vitoria y Pamplona son ciudades pioneras en aplicar el equilibrio y la sostenibilidad en sus edificaciones. La rehabilitación siempre se ha entendido como un asunto edificatorio, pero las ayudas públicas a la eficiencia energética están modificando el negocio de la rehabilitación. De momento hay ayudas y préstamos a la rehabilitación y a la mejora de la eficiencia energético, tanto para edificios como para viviendas aisladas. Cuando coincide rehabilitación con eficiencia se priman más valores personales, como las minusvalías. Se pueden obtener ayudas para la rehabilitación por la reducción del consumo energético en edificios: obras que contribuyan a la eficiencia energética, higiene, salud y protección del medio ambiente. Instalación de paneles solares; mejoras de la envolvente térmica del edificio; uso de energías renovables; mejora de instalaciones para suministros que ahorren agua. Para obtener las ayudas a la rehabilitación hay que solicitar a la Consejería que la actuación a financiar sea calificada como tal. Además, la solicitud de la ayuda se presentará antes de iniciar las obras (salvo casos excepcionales).El abono se realizará una vez finalizas las obras, aunque existe la posibilidad de que se conceda un anticipo del 50% con la calificación provisional. En el caso de que las viviendas tuvieran que destinarse al arrendamiento y no lo estuvieran previamente, otorgada la Calificación Definitiva será necesario visar los contratos de arrendamiento (en un plazo máximo de 6 meses), para que se proceda al abono de la subvención. El Plan Estatal de Vivienda y Rehabilitación 2009 2012 posibilita un apoyo a la eficiencia energética de las zonas ARIS y ARUS de carácter testimonial al permitir ayudas de 3.500, 2.800 ó 2.000 euros para las viviendas que obtengan calificación energética A, B ó C. Lamentablemente dichas ayudas están condicionadas a que se trate de viviendas protegidas de nueva construcción. 

La rehabilitación y la búsqueda de la sostenibilidad son las áreas de trabajo que reactivarán el sector de la construcción y la edificación en los próximos años. Así lo han señalado los expertos reunidos durante la Jornada “Rehabilitación y Sostenibilidad en las Ciudades Meridionales”, organizada por el Centro Superior de Edificación de la Universidad Europea de Madrid y que tiene lugar  y  en Madrid.

“El freno de la obra nueva ha situado a la rehabilitación como una de las áreas de expansión del sector, en el que los criterios de sostenibilidad tendrán cada vez mayor aplicación práctica”, explica Ignacio Fernández, profesor del Centro Superior de Edificación y director asociado de ARUP España. Precisamente en estos momento de contracción económica, este especialista apuesta por dar énfasis a la recuperación de edificios “no sólo porque actuar sobre los ya existentes es más barato, sino también porque nos permite aprovechar los recursos urbanos ya ejecutados. Además de ser más sostenible, esta medida responde también a criterios económicos”.

Por su parte, César Ruiz-Larrea, vicepresidente de la Asociación Sostenibilidad y
Arquitectura y director de Ruiz Larrea&Asociados, añade que la crisis ha demostrado que el modelo actual no funciona “y, lo que es más grave, que está generando alteraciones y desequilibrios en el planeta”. Por ello, los especialistas insisten en la importancia de velar por una construcción que permita ahorrar energía y consumir menos y por edificios que den lugar a un mayor equilibrio social en la ciudad, así como a una mejor calidad de vida y medioambiental. “Los beneficios de aplicarla es que la supervivencia nos va en ello”, indica César Ruiz-Larrea.

Como ejemplos de ciudades pioneras en aplicar el equilibrio y la sostenibilidad en sus edificaciones ambos expertos señalan Barcelona, Vitoria y Pamplona. En el otro extremo, muestra de insostenibilidad, explica César Ruiz Larrea, están aquéllas ciudades que “se han desarrollado de una manera caprichosa y banal, como Dubai, que carece de la más mínima posibilidad de cohesión social”.

La oportunidad perdida de España

Aunque España está en una posición privilegiada en el sector de la construcción por la calidad de sus profesionales, Ruiz Larrea no duda en indicar la necesidad de retomar posiciones porque “hemos perdido una oportunidad. Ya que se ha construido tanto, debería haberse hecho con criterios más sostenibles y coherentes por encima de puros beneficios económicos a corto plazo”. En este punto, Ignacio Fernández se muestra más optimista y señala que, “al menos, la parte de la obra nueva que se hecho con criterios sostenibles ha servido para aprender a usar estas nuevas herramientas. Ahora el futuro está en adaptar lo aprendido a la rehabilitación”.

La solución para recuperar la rentabilidad del sector y competir a la altura de los países líderes, como Alemania o Reino Unido, pasa, según César Ruiz-Larrea, por invertir en la industrialización y profesionalización del sector, exigiendo la búsqueda de la calidad.
“Debemos basar y cimentar el sector en una estructura industrial sólida a medio y largo plazo”.

El futuro: la combinación de energías

Otro de los temas abordados durante las Jornadas es la búsqueda de la eficiencia energética. A este respecto el gran reto, han indicado los expertos, es “producir y consumir la energía en el mismo entorno en el que estamos habitando”, Mientras tanto, el futuro es combinar las fuentes energéticas de manera que se logre una descentralización de las mismas.

“El 90% de la eficiencia energética de un edificio se deriva de medidas pasivas de diseño, es decir, del control de la entrada del sol, de la orientación del edificio o de asegurar la ventilación natural”, señala Ignacio Fernández. Esto pone de manifiesto la importancia de proyectar los edificios para evitar el consumo de electricidad, calefacción o refrigeración más allá del mínimo imprescindible.

Cabe destacar que, en nuestro país, el principal desafío de la construcción es protegerlas del calor, ya que “la mayor parte del consumo energético lo invertimos en la refrigeración”.

Por eso, este experto apuesta por edificios en los que cada una de sus fachadas, dependiendo de su orientación, tenga una estrategia preventiva distinta.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

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