9 de noviembre de 2009
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EDIFICACIÓN.
LA COMPETENCIA MUNICIPAL EN LA INSPECCIÓN TÉCNICA DE LOS
EDIFICIOS (ITE).
Valor añadido: Edificación.
Baleares. La competencia municipal en la inspección
técnica de los edificios (ITE). Guía práctica inmoley.com
relacionada: inspección técnica de los edificios (ITE). Aunque
el Código Técnico de la Edificación es una trasposición
al derecho español de la normativa europea, en materias tan prácticas
como es la inspección de lo construido <inspección técnica
de los edificios (ITE)>, cada ayuntamiento tiene que inventar la rueda
y hacer sus ordenanzas, que en la práctica se copian unas a otras.
Carece de todo sentido práctico y económico (ahorro de costes
administrativos, sobredimensionamiento de la administración, etc.)
regular municipalmente cuestiones que son técnicas. Por ejemplo,
en Baleares los técnicos han caído en la cuenta que los mismos
problemas técnicos de Palma de Mallorca existen en los edificios
de Mahón. ¿Entonces por qué hay ordenanzas diferentes?.
Como ejemplo de este estado de multiplicación de administraciones
y sobredimensionamiento y profusión de normas locales, el Estado
deja a los municipios completa libertad para crear sus propias ITE. No
diferencia entre municipios del tamaño de Sevilla o Madrid con municipios
de 200 habitantes. Se deja en manos de estos ayuntamientos determinar cuales
son los edificios más peligrosos, cuando se tienen que llevar a
cabo las inspecciones y quienes son las personas más calificadas
para llevarlas a cabo. Hasta el momento son los inspectores y técnicos
municipales los encargados de revisar los edificios en mal estado pero
no todos los técnicos tienen la misma cualificación, y algunos
colegios profesionales han denunciado que carecen de la titulación
adecuada. En taller de trabajo se examinarán diferentes ordenanzas
municipales de la inspección técnica de los edificios (ITE)
para comprobar que unas se copian a otras.
No existe ninguna ordenanza en Menorca
que obligue a los ayuntamientos a hacer revisiones periódicas de
los edificios más antiguos. La Ley de Bases de Régimen Local
no regula este aspecto y las administraciones locales sólo actúan
de oficio o cuando reciben alguna denuncia de los vecinos. Una práctica
no exenta de riesgo que ciudades como Palma o Madrid han relativizado con
la creación de una Inspección Técnica de Edificios
(ITE) que obliga a todos los propietarios de inmuebles -sean físicos
o jurídicos- a llevar un control exhaustivo sobre el estado de sus
fincas.
Menorca podría tener también
su propia ITV de edificios si prospera la iniciativa que a principios del
próximo año presentará el Col•legi d'Aparelladors
y Arquitectes Tècnics de Menorca (Cooat). La idea es plantear la
creación de una ITE insular porque a nivel local sería más
complicado ponerla en marcha. «Trabajamos en una propuesta conjunta
para implantar este mecanismo de control en todos los municipios de la
Isla», sostiene el presidente de esta entidad, Poncio Palliser.
Pero los aparejadores no han escogido
el mejor momento para presentar una iniciativa de este tipo. No es ningún
secreto que los ayuntamientos de Menorca, y de todo el Estado en general,
pasan por momentos complicados a nivel financiero tal y como se está
viendo reflejado en la mayoría de sus presupuestos. Lo dice el alcalde
de Maó, Vicenç Tur, quien recuerda que la implantación
de un sistema de estas características «no es una prioridad
ni es competencia municipal. Buena voluntad hay, pero primero tenemos que
ver lo que supondría una ordenanza de este tipo», apunta.
Ciertamente no es éste un
problema exclusivo de Maó, puesto que -como asegura el presidente
del Cooat- «incumbe a todos los municipios de la Isla». De
edificios con más de cincuenta años de edad, que son los
más vulnerables, se pueden encontrar en la mayoría de núcleos
urbanos y, en consecuencia, urge tomar medidas al respecto. «Las
administraciones insulares tienen que extremar las precauciones en todas
las localidades», advierte Palliser.
El Estado deja a los municipios
completa libertad para crear sus propias ITE. Serán estos quienes
determinen cuales son los edificios más endebles, cuando se tienen
que llevar a cabo las inspecciones y quienes son las personas más
calificadas para llevarlas a cabo. Hasta el momento son los inspectores
y técnicos municipales los encargados de revisar los edificios en
mal estado pero -según el presidente de los aparejadores- «muchos
no tienen siquiera el titulo de arquitecto. Creo que los técnicos
del Cooat serían los más adecuados para hacer las inspecciones
necesarias», concluye el presidente de esta entidad.
Desde el Colegio de Arquitectos
de las Islas Baleares (Coaib), recomiendan prestar especial atención
a las grietas para determinar el estado de salud de los edificios. Asimismo,
también hay que preocuparse si existen vigas abombadas de madera
o niveles importantes de óxido en las vigas de hierro.
Maó es un caso paradigmático
a nivel insular. Al igual que el resto de municipios de Menorca, no dispone
de una Inspección Técnica de Edificios (ITE) y hace inspecciones
periódicas «cada tres o cuatro meses». Aún así,
hay dieciséis expedientes abiertos a propietarios por edificios
en mal estado.
«Son los propietarios los
que tienen la obligación de mantener sus fincas bien conservadas»,
recuerda el alcalde de Maó, Vicenç Tur, para quien, si llegará
a producirse algún derrumbe en el municipio, la responsabilidad
siempre sería de estos últimos. «Tienen la obligación
de llevar a cabo las mejoras necesarias en los edificios que presenten
mayor peligrosidad», sostiene.
De los dieciséis casos que
hay abiertos en el municipio, prácticamente la mitad, siete, están
cerrados y dos en proceso de cumplimiento. El ayuntamiento todavía
no se ha puesto en contacto con cuatro de los propietarios que tienen causas
abiertas. Cabe subrayar que no existe en Maó ningún edificio
declarado en ruina.
Cuatro funcionarios se encargan
de hacer las inspecciones cuando reciben la denuncia de algún vecino.
Si detectan alguna irregularidad en el estado del edificio conminan a sus
propietarios a efectuar las reparaciones oportunas en el plazo que estimen
conveniente. Y si pasado este plazo los inmuebles siguen en el mismo estado,
los propietarios se arriesgan a ser multados con una cantidad que varia
en función de la gravedad del caso.
Por otra parte, estos mismos inspectores
suelen actuar también cuando observan algún elemento que
amenaza con desprenderse de un edificio como, por ejemplo, una persiana
en mal estado.
El Ajuntament de Ciutadella también
ha dado los primeros pasos para regular la situación arquitectónica
de los edificios más antiguos y en peor estado del municipio. La
alcaldesa Pilar Carbonero ha dado instrucciones a su directora de Urbanisme,
Sandra Díaz, para que se realice un inventario de los inmuebles
sospechosos de tener afectada su estructura con el objeto de poder garantizar
a tiempo su preservación.
La revisión se ha iniciado
en el centro histórico, con diferencia la zona de la ciudad que
mayor número de casas de antigüedad concentra. La pretensión
inicial del equipo de gobierno es actuar sobre los edificios degradados
y que más atenten contra la estética del casco antiguo.
Carbonero recuerda que en algunos
casos, como el de las viviendas abandonadas de la calle Sant Cristòfol,
el Ajuntament ya ha intervenido de forma subsidiaria para evitar problemas
de salubridad y seguridad que afectasen al resto del vecindario.
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